Universo: Materia Oscura

Hay cosas en el cosmos que se resisten a ser vistas. No sólo hay emisiones de partículas de luz visible; también hay infrarrojos, ultravioleta, microondas, rayos gamma… de todos los rincones nos llega radiación electromagnética.  Gracias a esto podemos ver infinidad de cosas que parecen estar “ocultas”, pero todo esto no es suficiente. Aún hay cosas que están ahí y no conseguimos detectarlas… ¿pero cómo sabemos que están?

Las detecciones realizadas son de forma indirecta. Tal vez no podamos verlas a “simple vista”, pero notamos sus efectos, como la gravedad, que interactúa con otros cuerpos. La materia oscura, esa gran enigmática que llena prácticamente el 27% de todo el cosmos por todos los rincones (no debe confundirse con energía oscura, flujo oscuro o fluido oscuro) es una de las cosas que sabemos que están ahí, pero que no podemos visualizar de forma directa. ¿Pero cuál es la prueba de que exista?

Sí nos fijamos en una galaxia, como la nuestra, sólo hay que fijarse como rotan las estrellas y las nubes de polvo y gas alrededor del eje central, el agujero negro supermasivo Sagitario A. Según la teoría de la gravedad, cuanto más cerca estés del centro más rápido giraras; y cuanto más te alejes, más despacio te desplazarás. Además de que cuanto más alejado estés mayor será la circunferencia que tengas que dar y más tiempo tardarás en dar una vuelta completa. Pero esto sería según la teoría, porque en la práctica es bien distinto (que sí que se corresponde con los sistemas planetarios, como el Sol y los planetas). ¿Qué pasaría si la galaxia fuera muchísimo más grande de lo que nosotros podemos visualizar? ¿Qué pasaría si hay un material, la teórica materia oscura, que hace que la galaxia se multiplique en tamaño? Imagínate que la galaxia es hasta 9 veces más grande de lo que visualizamos. Lo que nosotros “vemos” como alejado en el borde de la galaxia en realidad seguiría estando tan cerca del centro que las ecuaciones de la teoría de la gravedad encajan “al dedillo”.

Pero esta no es sólo una suposición para arreglar las ecuaciones, también hay otros fenómenos como: inexplicables movimientos galácticos, lentes gravitacionales donde no hay nada visible e incluso se ha podido apreciar su “huella” en el fondo cósmico de microondas. Todo apunta a algo invisible que llena el universo que ejerce fuerza gravitacional a su alrededor, que es eléctricamente neutra (no emite luz y no interactúa con las ondas electromagnéticas), es estable porque perdura en el tiempo y que es fría (no se mueve a velocidades cercanas a la luz). Los científicos se han puesto manos a la obra para intentar detectarla experimentalmente de forma directa, y así poder estudiar esta partícula tan escurridiza y exótica. ¿Lo conseguirán?